dijous, 29 de març del 2018

DIVENDRES SANT

Demà 30 d'abril, Divendres Sant, ens porta a programar aquests moments místics i sublims del anomenat pel mateix Wagner, Parsifal-Festival Sacroescènic.
La producció es de l'any 1992 a Berlín.
Direcció musical de un Daniel Barenboim en estat de gracia i interpretacions de John Tomlinson, Poul Elming i una jove i exhuberant Waltraud Meier. Fascinants tots els 12 minuts del vídeo i subtitulat en francés


dimecres, 21 de març del 2018

LA PRIMAVERA ES AQUÍ

Donem la benvinguda a la primavera amb el Winterstürme del acte primer de Die Walküre amb la producció de la Fura dels Baus que es va representar a Valencia l'any 2008, amb direcció musical de Zubin Mehta i les veus de Peter Seiffert com a Siegmund i Petra Maria Schnitzer com a Sieglinde.


dissabte, 17 de març del 2018

TRISTAN UND ISOLDE EN BERLIN

El dia 18 de març a les 16h pel canal Mezzo Live es pot veure la representació de Tristan und Isolde des de la Staatsoper Under der Linden de Berlin amb direcció musical de Daniel Barenboim i direcció escènica del afamat Dimitri Tcherniakov.   Les veus principals son a càrrec de Anja Kampe, Andreas Schager, Stephen Milling i Ekatarina Gubanova.

Metina Radach va ser-hi el dia 11 i ens envia una crònica.



Tristan und Isolde
Staatsoper Unter den Linden Berlin/ nueva producción 

PASATIEMPOS DIVERTIDOS



¡Qué divertido es un crucero! No hay más que gente importante que lo pasan bomba. ¿El tío con el esmoking que entra con el champán y las tapas es  Tristan o Enrique Iglesias? Y la chica del vestido verde largo que toca palmas con él:  ¿Quien es? ¿Es Edurne o la impaciente mortal Isolda? La nueva producción de 'Tristan e Isolda' de Richard Wagner da lugar a preguntas.

El director de escena ruso Dimitri Tcherniakov  se imagina la princesa irlandesa Isolda en un salón de reuniones de un lujoso y divertido crucero rumbo a Inglaterra, botín de guerra para un anciano rey en Cornwall. En el segundo acto vemos en vez del "jardín con árboles debajo del aposento de Isolda" un salón con árboles del papel pintado que cubre las paredes y un elegante comedor separado por puertas correderas . Los invitados del rey se divierten en ésa fiesta de caza y juegan con las escopetas. En ambos casos, mucha gente alrededor. Las charlas son animadas, todos se doblan de risa. Tristan es todo un animador. El público con razón sigue esperando los momentos melancólicos, el famoso acorde Tristan y la despedida emocional y triste. Mirando al libreto, constatamos lo siguiente: en 14 ocasiones se ríen o están hablando de ello, en 20 casos se menciona la palabra morir. En cierta manera se puede admitir que  el director de escena optó por una realización con muchas risas. 
A Tscherniakov no le importa que Tristan sea un guerrero medieval que mata al prometido de Isolda, que obligan a Isolda casarse con Marke, y que la partitura  hable de una noche de amor apasionado y consumado. Tcherniakov castra, los héroes son unicamente figuritas, lo trascendental se hace materia.  Parece que sobre el tercer acto.

Pero hay un tercer acto. En vez de un jardín ducal abandonado, vemos un cuarto con papel de pared fuera de moda. Es un dormitorio del castillo paternal de Tristan en Karneol, amueblado con una antigua vitrina, sillas, un sofá tipo Ikea. Entre los que entran en la habitación  hay un músico que se sienta en el camastro y toca de vez en cuando el corno inglés. En realidad, Tcherniakov no hace preguntas tontas: ¿Qué clase de risa hay y que nos hace reír realmente ? ¿ Hay un puente que lleva de la risa a la muerte? Isolde está decidida de apagar sus " luces vitales (... ) sonriendo". La noche de amor sonreía a ambos.
Andreas Schager y Anja Kampe representan una pareja wagneriana ideal:  a veces con brillo fuerte, a veces lírico y tierno, casi siempre con buena vocalización, , pero, eso sí, patinazos por falta de texto en el extenso dúo del segundo acto. Schager canta con enorme energía y fuerzas vocales, su timbre complace en qualquier momento, su entrega a la hora de actuar es total. Anja Kampe  también es una cantante con gran voluntad y talento a representar sus papeles, a veces incluso a cuenta de la interpretación vocal.  Completaron el elenco la excelente Brangäne de Ekatarina Gubanova, impresionante también Stephen Milling como rey Marke y bien los cantantes en los demás papeles. 

Daniel Barenboim dirigió su séptima producción 'Tristan' que nunca parece rutina: Reinaban los tonos sublimes, los tempi inteligentes, las cuerdas cariñosamente sensibles y poderosos. Un crucero musical con oleaje 


Metina Radach

función visitada: 11-03-2018

fuente: Cicero



dimarts, 13 de març del 2018

SCHUBERTÍADA DE NOU



Aquest és el darrer concert d’aquesta primera temporada del projecte Schubert Lied, que continuarà els propers dos anys dins la programació de L’Auditori. En aquest concert, la soprano suïssa Franziska Heinzen, juntament amb el pianista Benjamin Mead, ens oferirà Gretchen am SpinnradeGanymed i Erster Verlust, entre altres grans lieder de Schubert. Al costat d’obres mestres, aquests concerts ens permeten anar descobrint altres composicions que, malgrat no ser tan conegudes, mereixen ser interpretades en un cicle que fa possible la descoberta dels millors lieder de Schubert.

divendres, 9 de març del 2018

UNA GRAN SORPRESA

Rosa Ponselle (Rosa Ponselle) va ser una soprano lírica que va triomfar als inicis del segle XX en el Met de Nova York per la seva qualitat i també pel seu físic.  El seu repertori eren bàsicament òperes italianes i es per això que ens ha sorprès aquesta gravació de l'últim Wesendonck lied, Träume.
Un so esplèndid pel temps en el que es va gravar i un piano i una veu de meravella.




diumenge, 4 de març del 2018

TRISTAN UND ISOLDE PETRIFICADO EN AMSTERDAM



A falta de pocos días de cambiarse a Aix-en-Provence, el intendente artístico Pierre Audi se arriesga en la Nederlandse Opera Amsterdam, su lugar de trabajo durante muchos años, a poner en escena la ópera wagneriana Tristan und Isolde en co-producción con el Théâtre des Champs-Élysées y el teatro dell´Opera di Roma.

La escenografía y los vestidos de Christoph Hetzer nos presenta un mundo agonizando . En el primer acto, la escena está dominada por fragmentos desmoronados de un buque gigante que van cambiando siempre de posición. En el segundo acto, grandísimas flores misteriosas con un crecimiento casi incontrolado y petrificado dominan el escenario. En el último acto ya sólo existe el desierto, la naturaleza está sin vida y notablemente muerta. No se trata de un más allá indefinido místico o una posibilidad a ello, sino del camino hacia un mundo sin perspectivas llena de artificialidad y muerte. La dirección lumínica muy bien adaptada de Jean Kalman respalda aquel desarrollo durante con un concepto ideado de un sistema de colores e iluminación, sobre todo en el inmenso horizonte panorámico, sin dejar la escena en la oscuridad. En la muerte por amor de Isolde la muestra como una figura cortada de papel; la luz fuerte y pálida la acompaña desde el trasfondo. Los vestidos de Christoph Hetzer recuerdan a elementos abstractos-míticos de un tiempo indefinido y sólo en algunos casos hacen referencia al origen o cargo social de las figuras.

La dirección de las personas parece estática por fuera y nunca permite que los protagonistas amantes ni siquiera se acerquen o se toquen sin poder evitar que ciertos gestos de los artistas se correspondan con movimientos muy tradicionales. La interpretación de Melot cómo un anciano malévolo tullido que traiciona a Tristan por envidia con toda su debilidad corporal e intelectual  y que finalmente  le mata con un cuchillo después de muchas ataques de agresión, asombra en nuestros tiempos de political correctness. La abstracción practicada de imágenes y dirección artística ofrece un ambiente mítico a imaginarse o no. 

Steven Gould como Tristan se encuentra en muy buenas condiciones vocales. Su timbre oscuro brillante y aterciopelado ilumina todo el largo tiempo de su rol. Gould canta con economía calculada y disciplinada lo que le permite hacer frente al exigente tercer acto. Su fraseo musical es inteligente y focusado al abismo de la línea vocal o a los agudos. La voz nunca le falla, la vocalización es perfecta. Desgraciadamente, Gould ganó aún más peso corporal que le agrava moverse y tumbarse con agilidad. Ricarda Merbeth ha trabajado mucho en una interpretación respetable del papel difícil de Isolde. Su voz no está libre de un vibrato más o menos notable. Los agudos le cuestan y no siempre salen sin quebradizos. Por desgracia no se la entiende en ningún momento pero la interpretación del famoso Liebestod sonó perfecto y bien estructurado. Michelle Breedt no logra contrastar con el carácter vocal de Isolde. A pesar de un notable bajón vocal en el segundo acto que indica los años que Breedt lleva cantando en el escenario, el rendimiento total de su interpretación artística y vocal sabían convencer. Ian Paterson como Kurwenal, Andrew Rees como Melot, Martin Piskorski en el rol del jóven marinero, Roger Smeets como timonel y Morschi Franz como pastor completaron más que satisfactoriamente el elenco. El único verdadero acontecimiento de la noche sin embargo fue Günther Groisböck en el papel del rey Marke: Con maravilloso timbre sonoro, el bajo austríaco presentó un retrato de papel de un rey triste que llora su suerte y su enorme tristeza sobre el cambio inexplicable de Tristan con extraordinaria solemnidad y belleza vocal.  El muy respetable coro de caballeros de la Nederlanse Opera redondearon la impresión vocal masculina muy positiva. 

La Nederlands Philharmonik Orkest es una orquesta de alta categoría. Su director de orquesta Marc Albrecht sin embargo pareció no haber encontrado la llave de acceso ni a la obra, ni a la puesta en escena y dirigió el primer acto de forma demasiado romántica y suave. La lectura del segundo y tercer acto fué de rutina y no provocó una piel de gallina. Hubo fuertes aplausos para el director de escena y todavía intendente del teatro Pierre Audi que salió a saludar con motivo de la Dernière.



fuente: Opera online

Metina Radach